Blog, libros e inciensos

Ene 17, 2025 | favoritos

El blog vuelve.

Hace once años y medio, un buen día del mes de abril, decidí publicar mi primer post en La Merienda a las 5. Desde entonces, salvo algún pequeño parón momentáneo, no he dejado de escribir. Por escribir, ¡hasta he escrito un libro! Así que si… llevo once años martilleando al personal con mis palabras y pensamientos.

Mucho ha cambiado el panorama desde entonces. Mis hijos son oficialmente adolescentes, he cambiado dos veces de trabajo, hemos vivido una pandemia, mi padre falleció, tiré abajo mi casa y la volví a levantar, e incluso tenemos un perro.

Dejé de hacer manualidades con mis hijos, para estudiar sobre adolescentes, aprendí a bordar y me hecho muy amiga de la AirFryer. Dejé de hacer repostería a todas horas, he viajado mucho más y más lejos, y volví a devorar libros.

Pero muchas veces miro con nostalgia aquellos años de La Heredera, del Mediano, del Mayor y del Santo; de mis fotos hechas con la cámara réflex y de compartir aquello que iba aprendiendo por el camino.

Hay quien dice que los blogs vuelven, que lo escrito vuelve, en contraposición al bombardeo de imágenes y vídeos al que sometemos a nuestros cerebros desde primera hora de la mañana.

Entre nos, no creo que el tema vuelva con la misma intensidad novedosa de hace trece años, y que, en la batalla contra Instagram, TikTok o YouTube, tenemos más posibilidades de perder que de ganar.

Desde luego las nuevas generaciones dudo que prefieran pararse a leer, es más cómodo scrollear diez vídeos por minuto, y los que pertenecemos a los Millennial o anteriores, pues lo haremos más por nostalgia, o si me apuras, por salud.

El caso es que, aunque llevo más de año y medio escribiendo dos post semanales para el Club, soy de naturaleza intensa y siento que tengo que recuperar de algún modo el blog, aquel cuaderno de bitácora y humilde diario de madre, donde compartir aquellas cosas que descubría, libros que leía, exposiciones que visitaba o mis favoritos, entremezclados con consejos de planificación y orden.

Y como solo es cuestión de satisfacción personal, allá vamos, empecemos con un variadito, en el que os hablaré de libros e inciensos.

MIS TRES LIBROS FAVORITOS DEL 2024

Sé que esta sección os gusta, así que comenzaré por un valor seguro: libros.

En el 2024 me propuse leer 24 libros y leí 39. Estoy tremendamente orgullosa de mi misma. ¡Pero esa es una diferencia muy grande, te quedaste muy corta el proponerte el reto de leer! pensarás. Pues lo cierto es que venía de una muy mala racha desde 2020, donde perdí completamente la capacidad de concentración, retención y disfrute con la lectura. Pero a finales del 2023 recuperé en parte el ritmo, y si en 2022 había conseguido leer 8 libros, en diciembre del año pasado terminé con 17. Así que animada por la dinámica que había cogido me propuse forzar un poco, y sin ninguna expectativa, en junio, había superado el reto.

Este año he decidido forzar un poquito más, y me he propuesto leer 36 novelas.

El caso es que el 2024 fue un año de excelentes lecturas y destacar solo tres no ha sido tarea fácil, pero allá vamos:

  • Los reyes de la casa de Delphine Vigan, me pareció brutal. Muy diferente a lo que ya había leído de ella (Las Gratitudes, Las horas subterráneas) y me dio muchísimo que pensar. La novela trata de la controversia por el uso, casi explotación, de los niños menores de edad en redes sociales, por parte de sus padres, para obtener beneficios económicos. Una novela con tintes de misterio barra thriller, que te mantiene intrigada de principio a fin.
  • Lecciones de química de Bonnie Garmus. Si hay una novela que recomendaría hasta la saciedad, es esta. Con ella he reído, he llorado, me he enfadado, enternecido. Es simplemente, perfecta. Y no te cuento más porque si no la has leído, tienes que hacerlo.
  • Amapolas en octubre, de Laura Riñón Sirera. Porque es la novela que me hubiera encantado escribir a mi. Una historia de historias familiares, de amor por la literatura, que transcurre en lugares que me encantan y con personajes maravillosos.

Y al hilo de los libros, os contaré que desde hace años uso una aplicación que se llama Goodreads, para llevar un control de todo lo que leo y lo que quiero leer.  Es gratuita, y aunque están en inglés aparece cualquier libro de cualquier edición, es decir, que están también en español.

La aplicación te permite que hagas una lista con aquellos libros que de repente te recomienda alguien, o que ves en una librería o en una publicación. Una vez que los consigues puedes ir haciendo un seguimiento de tu lectura, cuándo lo empiezas, cuándo lo acabas o qué porcentaje te falta. Y por supuesto dejar tu valoración y/o una reseña (en el idioma que quieras). A mi me ayuda muchísimo a la hora de recordar qué he leído y por qué me ha gustado o no determinado libro, porque en general tengo memoria de pez.

Es también a través de Goodreads que llevo el control de mis retos, pero es que además la aplicación te ofrece muchos otros a los que apuntarte. Sé que tiene muchas otras posibilidades de uso, pero la verdad es que no me he parado a indagar mucho, así que si tu la usas y hay alguna que te resulte útil y divertida, comparte dejando un comentario.

Y ahora, pasemos al tema de los …

INCIENSOS

Sí, este es un tema novedoso para muchos, lo sé. Pero me he vuelto muy fan de los inciensos.

A raíz de una publicación de Instagram, en la que mostraba cómo quemaba una varilla en el salón de mi casa para renovar la energía del espacio, he recibido algunas preguntas al respecto. Así que voy a resolverlo por aquí.

Empezaré contando que no siempre me ha gustado. Es más, sigo siendo bastante especialita con los olores. En general no me gusta ningún olor fuerte y amaderado, por ejemplo, tipo pachuli. Siempre tiendo a los frescos, afrutados, y lavanda. Sin embargo, hace un par de años, cuando empecé a interesarme por el tema de las energías descubrí el Palo Santo y la Ruda y desde entonces soy muy fan de esos dos inciensos, que compro en un herbolario, y enciendo en función de lo que sienta que necesito, prácticamente a diario.

  • El Palo santo es un árbol místico, que tradicionalmente se usa para combatir resfriados y gripe pero también para minimizar el impacto del estrés además de para ayudar a la creatividad y dicen, que atraer la buena fortuna.
  • La Ruda es una planta medicinal, cuyo incienso que se usa tradicionalmente para repeler a los malos espíritus, sensaciones y sentimientos y por tanto a las malas energías y vibraciones.

A mí me gusta encender primero una vela, y de esa llama, encender la varilla, que a veces paseo por la casa (especialmente por las zonas que creo que pueden estar más “afectadas” ) o lo dejo que se consuma en un soporte, por ejemplo, cerca de mí, en mi mesa de trabajo.

Las cajitas de incienso las compro en el herbolario, pero los venden en más sitios.  Los de la marca Balaji Agarbatti son mis favoritos y son los que repongo ya regularmente desde hace meses, aunque el otro día compré este de Satya Nag Champa porque lo veo en muchos sitios, pero aún no lo he probado.

El caso, es que en casa se nota, y el olor les gusta mucho más que cualquier ambientador. Yo creo que porque lo identifican ya con las sensaciones positivas que les genera. Porque estas varitas son mucho más que un ambientador, es una manera de limpiar en profundidad tu hogar, mejorando la calidad del aire, la capacidad de concentración o general un ambiente más acogedor entre otras cosas. Así que si no los has probado aún dales una oportunidad.

Si te interesa el tema, por favor, házmelo saber, muchas veces gracias a ello, me pongo a investigar más y descubro nuevas cosas interesantes.

Y con esto creo que llegamos al final de este blog de vuelta, en el que como te dejaba entrever al comienzo, pretendo volver a compartir un poco cosas que disfruto, que descubro, exposiciones, libros, gastro, viajes…un variado interesante.

Un abrazo y nos vemos pronto

4 Comentarios

  1. Barbara

    Ay, qué alegría Esther, ¡me encantaba tu blog!

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    • Esther

      Me alegro mucho Bárbara!!

      Responder
  2. Genoveva

    Hola,
    Me ha encantado todo lo que explicas y cómo lo haces.
    Una pregunta. De dónde sacas el tiempo para llegar a todo? Supongo que es cuestión de organizarse… aún así a mí me parece imposible.
    Cuando lees? Es para crearme el hábito, últimamente lo tengo descuidado.
    Un abrazo muy fuerte y gracias!!!!!

    Responder
    • Esther

      Hola! Efectivamente es cuestión de organizarse y convertirlo en una rutina. Por ejemplo, si se que voy a tener ratos muertos me llevo el libro conmigo (para eso el Kindle ayuda mucho) y mientras espero a que me atiendan o llegue el autobús, leo. Ahora que mis hijos son mayores, me gusta mucho leer por la tarde antes de cenar, como unos 20-30 min. E intento leer en la cama (pero sin grandes expectativas porque normalmente me quedo dormida a los 5 min. y no me entero de nada). Pero vamos, que con 20 min. diarios puedes hacer mucho! Ánimo! Y gracias por dedicarme un rato. Bss

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