Últimamente siento que me falta energía, que todo me cuesta el doble, que lo que me apetece es estar sentada o tumbada en cuanto me es posible. Me pesa el cuerpo, pero también la mente. La horrible sensación de “No doy para más” se ha asentado en mi vida, y parece que no quiera marcharse. ¿Qué hago? Pues he estado buscando y he encontrado un montón de consejos coherentes que comparto contigo aquí.

Para empezar, me ha sorprendido que no es algo puntual, sino que existe todo un término acuñado por el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido que se llama: TATT (Tired all the time) o lo que viene siendo el agotamiento casi crónico, y afecta a una inmensa mayoría de las mujeres del s.XXI, al margen de que sean madres o no, trabajen fuera de casa o no.

¿Pero por qué? ¿Cuál es la causa?

CAUSAS DE LA FALTA DE ENERGÍA

¿Por qué nos sentimos para el arrastre la mayoría de los días? ¿Por qué llegamos a la cena agotadas? Generalmente se debe a causas provocadas por el tipo de vida que llevamos.

• Falta de sueño
• Mala alimentación: poco saludable, exceso de productos procesados, consumo de azúcar, falta de productos frescos, etc.
• Estrés
• Estar viviendo cambios importantes en la vida
• Cambios hormonales
•  Algunas enfermedades
• Efectos secundarios de algunos medicamentos o tratamientos médicos

¿CUÁNDO DEBEMOS PREOCUPARNOS?

Cuando el cansancio no se debe a causas externas (falta de sueño, mala alimentación, estrés, o cambios vitales) , se prolonga más de un par de semanas y se acompaña de otros síntomas como los que veremos más adelante, deberíamos consultar al médico de cabecera para que nos realice un análisis de sangre y dictamine qué tratamiento es el más adecuado para paliar los síntomas y mejorar.

Por ejemplo, así a grandes rasgos, algunas enfermedades que conllevan cansancio, y otros síntomas que deberían alertarte y animarte a consultar al médico:

• Anemia: falta de energía, taquicardias, falta de aliento, piel pálida.
• Diabetes: mucho cansancio, mucha sed, hacer pipí con mucha más frecuencia de lo normal, pérdida de peso sin causa justificada.
• Hipertiroidismo: fatiga, pero a la vez nerviosismo, ansiedad, irritabilidad, debilidad muscular o temblor de manos, intolerancia al calor
• Hipotiroidismo: fatiga crónica, aumento de peso, piel seca, dolores musculares, latidos lentos, permanente sensación de frío.

CUANDO NO ES UNA CUESTIÓN MÉDICA

Si eres del Club OEMVI puedes continuar leyendo este post en el que seguiremos hablando sobre sobre:

• ¿Qué hacer cuando no se trata de una enfermedad sino que es por estrés, falta de sueño, cambios en nuestra vida, etc.? 
• La mañana que te llenará de energía para el resto del día
• Alimentos recomendados para recuperar la energía

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